Nuestra Voluntad
Dios mio, muéstrame la dirección.
Dirige mis pasos momento a momento,
para no desviarme de la senda directa.
El exilio fue más duro que lo esperado. Y más aún.
El exilio fue más largo que lo esperable.
Ayúdame a regresar a casa lo antes posible.
Ayúdame a permanecer en esta cruz;
mientras haya un propósito en ello;
y a liberarme, en cuanto deje de haberlo.
“Hágase nuestra Voluntad
en la Tierra como en el Cielo”
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