Cuando se despierte la
conciencia búdica
y se vislumbre el gran organismo del que somos parte.
Cuando se comprenda que no se puede evolucionar,
sin colaborar con la evolución general.
Cuando se vea claramente la Ley de acción y reacción
en cada suceso.
Cuando por fin el hombre llegue a la cuenta
de que dañando a sus semejantes
se hace daño a si mismo;
estaremos listos para ingresar en el nuevo Reino,
el que nos fue prometido desde siempre.
y se vislumbre el gran organismo del que somos parte.
Cuando se comprenda que no se puede evolucionar,
sin colaborar con la evolución general.
Cuando se vea claramente la Ley de acción y reacción
en cada suceso.
Cuando por fin el hombre llegue a la cuenta
de que dañando a sus semejantes
se hace daño a si mismo;
estaremos listos para ingresar en el nuevo Reino,
el que nos fue prometido desde siempre.